En 2013 se disparó la venta en un 36% y el 11,1% correspondió a ciudadanos no españoles
La compraventa de viviendas por parte de ciudadanos extranjeros en España copó el 11,1% del total de transacciones realizadas en 2013, lo que supone alcanzar la cota máxima en la serie histórica, según el anuario inmobiliario del Colegio de Registradores (escribanos) español.
Unas 36.600 viviendas fueron adquiridas el pasado año por ciudadanos extranjeros, lo que supone un incremento del 36,6% respecto a las 26.790 adquiridas el ejercicio precedente, según se desprende del estudio.
Desde el inicio de la crisis, el porcentaje de viviendas compradas por extranjeros pasaron del 4,24% del total en 2009, hasta el 11,15% que representó el pasado año.
El Colegio de Registradores considera que los ciudadanos extranjeros están suponiendo un “factor dinamizador de la demanda de vivienda” que se está mostrando “especialmente activo durante los últimos trimestres” y que, “previsiblemente, seguirá mostrando intensos signos positivos en los siguientes”.
El estudio destaca el cambio de perfil del comprador extranjero de vivienda, de forma que mientras que en la actualidad el grueso corresponde a nacionalidades que adquieren una casa con fines turísticos, antes del estallido de la crisis correspondía a extranjeros que se asentaban laboralmente en España.
Asimismo, el informe subraya que el “intenso descenso” que el precio de la vivienda registró en España desde el inicio de la crisis convirtió “en una gran oportunidad” comprar una vivienda “a aquellas nacionalidades menos afectadas por la crisis económica”.