Va por los peronistas del Gran Buenos Aires que tienen o tuvieron poder. Aseguró que todos los días le llega información. "Le está lloviendo información todo el tiempo", afirman desde su entorno
La líder de la Coalición Cívica, quien todo indica se habría
bajado de la lucha por el Senado 2017, se muestra como una especie de
"caza peronistas" y ahora le apunta fuerte al massista Sergio
Villordo, bajo el patrocinio de Mónica Frade.
Por caso, amplió sus denuncias contra el ex intendente de Quilmes y actual
diputado massista en la causa en la que se investiga una supuesta defraudación
fiscal, lavado de dinero y enriquecimiento ilícito que quedó a cargo del juez
federal de Lomas de Zamora, Alberto Santamarina.
Carrió, según publica DIB, dijo que Villordo "realizó una verdadera
orfebrería societaria apenas dejado el Municipio de Quilmes, registrando un
notorio enriquecimiento gracias a empresas dedicadas a la construcción y
vínculos con otras de Berazategui".
Vale recordar que luego de que el principal acusado de cometer el triple crimen
de General Rodríguez, Ibar Pérez Corradi, lo señalara como uno de los
responsables del tráfico ilegal de efedrina, Villordo sumó un nuevo dolor de
cabeza, además del que le causa Carrió.
Según pudo saber LaTecla.info, hay grandes posibilidades de que se reabra una
escandalosa causa en su contra, en la que se lo acusa de atropellar a un hombre
y esconder su cadáver en el freezer para luego enterrarlo en el último día de
diciembre de 2003.
La denuncia fue presentada en 2007 ante la Fiscalía General
de Quilmes por Gladys Pérez, ex concubina de Sebastián Giancristóforo, conocido
como “Cacho” Rey, uno de los colaboradores de máxima confianza del por entonces
Jefe Comunal quilmeño.
De acuerdo al testimonio de la mujer, tardó cuatro años en acudir a los
Justicia puesto que vivía “amenazada” por su ex pareja, a quien había
denunciado por violencia de género en reiteradas ocasiones.
Cuando “Cacho” Rey falleció, Gladys destapó la olla. Según relató en su
denuncia, Villordo, su ex marido y el chofer llegaron al domicilio cerca de las
23 del 31 de diciembre de 2003.
"Estaban nerviosos, exaltados", relató y detalló que en su presencia
y de Giancristóforo comenzaron a llamar a un policía pues habrían tenido un
accidente de tránsito donde murió una persona.
La mujer dijo que la víctima estaba en un auto que podría ser un Renault 19
gris y al abrir el baúl "ve que hay una persona muerta tapada parcialmente
con diarios. Era un hombre de 35, 40 años, de aspecto boliviano, ensangrentado",
contó la abogada de la denunciante, en 2007.
"A los minutos aparece una camioneta de la comisaría 1ra. de Quilmes con
dos uniformados. Se va Villordo y antes hablan que tienen resolver esto y le
hacen vaciar el freezer de su casa", señaló.
Según la abogada, su clienta vio que el chofer y Alejandro colocan "el
cadáver dentro del freezer, lo cargan en la camioneta de la Policía y
desaparecen" y le dicen que lo lleven a una casa de San Francisco Solano
para enterrarlo.
"Después estas dos personas lavan y se llevan el coche y al día siguiente
quemaron ropas del muerto en un tacho", agregó. Según la denuncia, por
"comentarios" que oyó quien manejaría sería Villordo al que Rey le
habría dicho "yo me voy a hacer cargo de todo, quedate tranquilo voy a
decir que manejaba yo".
Por su parte, en aquel entonces, Villordo negó la versión al señalar que no
conocía "ninguno de los domicilios" mencionados y dijo que en esa
época "no tuve un sólo accidente de tránsito ni lesioné ni perjudiqué a
nadie".
"¿Cómo puede ser que llegue una camioneta con dos policías, luego se
entierre a una persona y a lo largo de 4 años no se sepa nada? Es una falsedad
y una mentira completa", contraatacó y vinculó la denuncia con una
sucesión de bienes entre la pareja.
La investigación quedó trunca a 45 días de haber comenzado y nunca más avanzó.
¿La razón? La presunta vinculación de Villordo con la Justicia de Quilmes y la
connivencia con la Policía
que habría ayudado a encubrir en crimen.
“La connivencia policial existió. Villordo estuvo casi 10 años prófugo de la
policía y estaba en el centro de Quilmes. Cumplía su función pública.
Claramente, el comisario Javier Fredes trabajo para él”, relató a LaTecla.info
una fuente cercana a la causa, quien agregó que “la Justicia ha funcionado al
compás de lo político”.
La posibilidad de que se reabra la causa es cierta, aunque aún no hay fecha
precisa al respecto. “Se está analizando, se necesitan garantías para que
avance”, confiaron a este medio.