Se conocieron los entretelones de la reunión entre el Gobernador rionegrino y el Presidente Macri. No se habló del Plan Castello pero todo hace indicar que cesará la inversión. También pidió bajar el déficit fiscal de la provincia
El pasado viernes el Presidente de la Nación Mauricio Macri recibió en Casa de Gobierno al gobernador de Río Negro Alberto Weretilneck, en un encuentro más de una serie de reuniones que el mandamás de la Nación está llevando a cabo con los mandatarios provinciales.
Concretamente, Macri apuntó al endeudamiento de la provincia, que se vio profundizado en estos últimos dos años de gestión de Weretilneck con la colocación de bonos y el pedido de deuda para sustentar el mega plan de obras Castello, que incluye proyectos ambiciosos a lo largo y ancho de la provincia.
En diálogo con el portal de noticias Letra P, Weretilneck aseguró que Macri le pidió "seguir reduciendo el déficit fiscal para gastar lo que ingresa y bajar el nivel de endeudamiento de la provincia", lo que echaría por tierra definitivamente la posibilidad de una segunda etapa del Plan Castello, alguna vez pergeniada por el mandatario provincial en pos de levantar la imagen de su gestión.
Por otra parte, respecto de las obras a cargo del Gobierno Nacional, que ante la crisis económica que sacudió a la Rosada en las últimas semanas parecían peligrar, el Gobernador confesó que le consultó al titular de Vialidad Nacional, quién aseguró que no existe la decisión de paralizar ninguna obra ya iniciada.
La realidad económica de la provincia y el país hace repensar las estrategias a los oficialismos a cada paso. Esta vez, la reunión en Buenos Aires tuvo matices políticos, ya que el Presidente buscaba refrendar apoyos de Gobernadores, aunque todo hace indicar que no solo se trató de un encuentro de rutina, sino que forma parte del nuevo rumbo del Gobierno Nacional, que deberá ajustar las clavijas si quiere cumplir con las exigencias del FMI.