La UFI Nº1 del Departamento Judicial de Morón a cargo del Fiscal Javier Baños imputó al intendente Ramiro Tagliaferro; a la presidenta del Concejo Deliberante Analía Zapulla y a los concejales del Bloque Cambiemos por no restituir el busto de Néstor Kirchner en la plaza de la Democracia.

Según reza la resolución, fueron acusados de “desobediencia (artículo 239 del Código Penal), incumplimiento de los deberes de funcionario público (Art. 248), y omisión o retardo de actos de oficio (Art. 249)”, al no cumplir con la orden judicial que suspendía la ordenanza que avanzó en la destrucción de la estatua al expresidentes. 

Fue a partir de una denuncia penal presentada por Unidad Ciudadana Morón contra el Gobierno local por actuar fuera de la ley y avanzar con una ordenanza que se encuentra suspendida por orden de la Justicia.

“Mientras se llevan a cabo las distintas instancias en el Fuero Contencioso Administrativo, la ordenanza por la cual se retiró el busto está suspendida, es decir que el busto debería reinstalarse en la plaza hasta tanto se defina la cuestión de fondo.

Celebramos esta decisión que respalda, una vez más, el pedido que veníamos haciendo desde Unidad Ciudadana”, señalaron en un comunicado los referentes y funcionarios del kirchnerismo moronense.

“Tagliaferro y sus concejales, en una muestra más de abuso de poder y de no respeto a la normativa vigente, no han dado cumplimiento a la resolución dictada por la justicia ya que removieron el busto y no ha sido reinstalado”, añadieron.

Desde Unidad Ciudadana aseguraron que el intendente “se apuró a sacarlo sin esperar la resolución de la jueza en lo Contencioso Administrativo que el mismo día de la sesión ordenó al Gobierno Municipal la entrega de toda la documentación del caso para verificar si se cumplimentó con el proceso administrativo necesario. Tagliaferro sabía de la existencia de estas actuaciones por lo que se le requirió que no ejecute la remoción del monumento hasta que se expida la Justicia. Sin embargo, conducido por ese espíritu de rencor que rodea esta situación, sin publicar siquiera la ordenanza y el decreto promulgatorio en el Boletín Oficial Municipal, ordenó la remoción del monumento con la específica finalidad de no acatar lo pedido”.

La imputación, vale aclarar, alcanza a todos los concejales de Cambiemos de Morón: Vanesa Sosa, Romina Fusco, Juan Nardo, Carlos Solia, Adriana Ortíz, Leandro Ugartamendia, Emiliano Catena, María Eugenia Brizzi, Nicolás Canario Soto, Alejandra Liquitay y Rolando Moretto, quienes votaron a favor de la remoción del busto.

“Este revanchismo político es lo que los lleva a destruir el Estado de Derecho, incumpliendo sistemáticamente las normas que regulan el funcionamiento del Estado. Así los gobernantes y las mayorías legislativas de turno se arrogan facultades, violando procedimientos y cercenando derechos”, concluyeron.