El ministro de Hacienda expuso en la Cámara Baja. La iniciativa contempla un crecimiento del PBI del 1%, una inflación en torno a 34% y un dólar promedio de 67 pesos. La Ley de Leyes se tratará después de las elecciones de octubre. Reconoció que los resultados de estos cuatro años fueron inferiores a los esperados
El ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, presentó ante la Cámara de Diputados del proyecto de Ley de Presupuesto para 2020, que contempla un crecimiento del PBI del 1%, una inflación en torno a 34% y un dólar promedio de 67 pesos.
El encuentro fue encabezado por el titular del cuerpo, Emilio Monzó; el presidente de la comisión, el macrista Luciano Laspina, y otros diputados del oficialismo y la oposición.
En el transcurso del encuentro, el Lacunza reconoció los errores de la gestión, admitiendo, entre otras cosas, que "los resultados de estos cuatro años han sido inferiores a los esperados”.
Entre los factores negativos que recibió este Gobierno, Lacunza destacó: “distorción en precios relativos”, “inflación”, “atraso cambiario” y “subsidios respecto de la herencia”.
Por otra parte, el ministro admitió que “el gradualismo, probablemente, no haya sido una elección sino una imposición de la realidad”, y refirió que "la deuda siempre es la suma de los déficit de un período, con lo cual es difícil cuestionar, al mismo tiempo, el aumento de la deuda y el presunto ajuste del gasto público”
Tal como publicó LaTecla.Info, la denominada "Ley de Leyes" prevé un crecimiento de la economía para el próximo año, vinculado a una suba de las exportaciones del 1,3% y una recuperación del consumo privado que se ubicaría en el 1,4 por ciento, aunque estimaciones privadas remarcan que habría una caída de la economía cercana al 1%. Así, continuaría el arrastre marcado este año, en el que se espera una retracción del 2,6 por ciento.
En relación a la deuda pública, dijo que el aumento de la deuda es la suma de los déficits durante un período. De nada sirve que los lunes propongamos baja de impuestos, los martes que no bajen los subsidios, y los miércoles que no aumente la deuda”,añadiendo que "el nivel de deuda es reflejo del déficit fiscal y el déficit tiene mucha persistencia. El nivel de deuda pública total ronda el 85% del PBI. Bien medido es bastante menor, dado que la deuda se evalúa al tipo de cambio actual y el PBI al promedio anual”.
En este sentido, el ministro Lacunza puntualizó que la deuda pública en manos privadas “asciende a un 33% del PBI. La capacidad de renovación depende de las posibilidades de repago de esa deuda, que obviamente depende críticamente de la trayectoria fiscal esperada. A nuestro juicio, con ese volumen, no existe actualmente un problema de solvencia respecto a la deuda argentina, sino de liquidez, por la incertidumbre respecto a la trayectoria fiscal esperada en el futuro, que está precipitando dudas de los bonistas en el presente.”
En otro orden, manifestó que "prevemos un escenario macroeconómico donde, una vez superada la incertidumbre electoral y despejadas las dudas sobre la sustentabilidad de la deuda, se podrá retomar el sendero de crecimiento moderado a partir del primer trimestre de 2020. Con las exportaciones como motor más dinámico de la demanda agregada, con las cantidades exportadas orillando su máximo histórico, con previsiones de una buena siembra cosecha granaria, la maduración de algunas inversiones, como Vaca Muerta, y la tracción de Brasil como destino principal de nuestras manufacturas industriales”.
Además, Lacunza expresó que una leve recuperación de las importaciones terminaría conformando un superávit comercial cercano a los USD 18.000 millones, con el consumo privado recuperándose parsimoniosamente desde niveles muy deprimidos, y también la inversión, aunque en el promedio anual no se prevé que pueda superar a la de este año.