La legendaria frase “nadie es profeta en su tierra” no cabe en la historia política de Aníbal Florencio Randazzo, actual ministro del Interior del Gobierno Nacional e hijo pródigo de la ciudad que lo vio nacer, Chivilcoy.

Y es que, con apenas 60 mil habitantes, esta localidad surgida a expensas del ferrocarril y de la actividad agropecuaria se ha convertido, de la mano del ascenso político de “El Flaco”, en una especie de urbe con tranquilidad de pueblo.

Todo se volvió nuevo: los accesos, el pavimento de las calles, la red cloacal, la red de agua potable, las escuelas, las plazas. Unas pocas fábricas desperdigadas se transformaron en el moderno Parque Industrial de Chivilcoy, que hoy tiene colmada su capacidad con firmas que exportan sus producciones.

Paseos, clubes de campo, un hospital capacitado con la última tecnología, le han valido a Randazzo su nombre estampado en una placa sobre la puerta de una de las salas del Partido Justicialista local. Las redes sociales han hecho lo suyo: existe un numeroso grupo en Facebook denominado “Queremos un monumento para Florencio en Chivilcoy”.

Los edificios de educación pública son nuevos y hasta se construyó un Centro Universitario donde desde este año se puede estudiar la carrera de abogacía con título de la Universidad Nacional de La Plata.

Tres espacios de Chivilcoy fueron declarados Monumentos Históricos por la presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner: la iglesia, la municipalidad y el casco de una estancia.

Y es que una simple visita de Randazzo a la ciudad puede incluir millones de pesos en un abrir y cerrar de ojos. Por citar un ejemplo, un día de agosto de 2007, durante un paso fugaz por Chivilcoy, repartió $ 2.190.000 millones en subsidios para diferentes instituciones, presentó el proyecto de construcción del Centro Universitario y del Centro Cívico y Cultural Chivilcoy, ambos anuncios hoy concretados.

La ruta y la industria

En 2004, mientras Randazzo ejercía su cargo de Jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires, el entonces gobernador Felipe Solá le habilitó lo que todos coinciden en denominar como la obra más ambiciosa de Chivilcoy: la pavimentación de la circunvalación de la ciudad; quince kilómetros en forma de cruz, con dos manos y un separador central con tres columnas de alumbrado por cuadra y un monto total estimado en 60 millones de pesos.

También fue junto al ex gobernador Solá que Randazzo dio el puntapié inicial para otro de los proyectos más onerosos del distrito: la formación del parque industrial.
Hasta 2007, el predio donde se radicaban las fábricas de la zona no tenía ni consorcio; fue en ese año que Randazzo consiguió la personería jurídica del espacio, para luego propiciar la conformación de un Concejo de Administración.

Con la presencia del entonces presidente Néstor Kirchner, ese año se inauguró el nuevo sector del Parque Industrial y, simbólicamente, de las empresas Paquetá, El Gauchito y Prodeo, que ya estaban funcionando. La inversión total proyectada hasta 2011 para mejorar el complejo industrial supera los 20 millones de dólares.

Al mes siguiente, Kirchner y su comitiva volvieron a Chivilcoy, para reinaugurar Paquetá. Muestra de las bondades de tener un hijo pródigo político en la ciudad son los anuncios que se realizaron durante esa visita: obras por un monto superior a los $ 131 millones.

El incentivo hizo que las firmas comenzaran a radicarse en esta mediana localidad. En octubre de 2007 se inauguró una planta de Adidas, en 2008 la presidenta Cristina Fernández cortó la cinta de la fábrica El Gauchito -que ya había sido inaugurada- y de la nueva planta industrial de GKN Sinter Metals de Argentina.

Ese mismo año, Ovoprot Internacional adquirió un predio de 50 hectáreas, para construir una planta productora y procesadora de huevos de gallina. Dos años antes, Red Surcos, empresa argentina especializada en la provisión de insumos y servicios agropecuarios, había inaugurado una nueva sucursal en Chivilcoy. Polyperfil también fue de la partida.

Leyes y partidas

En febrero del año pasado una nueva medida gubernamental le dio un fuerte empujón al desarrollo industrial de la tierra prometida de Randazzo: la creación del Resguardo Aduanero en el Parque Industrial.

En los hechos, el organismo permite que las empresas de la región que realizan exportaciones puedan efectuar todas las tramitaciones en la propia ciudad.

Al mes siguiente de conocida la medida, se sumó al parque la fabricante de máquinas para la industria lechera Inpack Equipamientos SA, y al poco tiempo, el ministro de la Producción de la Provincia, Martín Ferré, entregó subsidios por 142.000 pesos para el Distrito Industrial de la Maquinaria Agrícola del Oeste (DIMA), organismo integrado por pymes de la zona.

De la misma manera adquirió sus terrenos CNC Mitre, empresa local que obtuvo la posibilidad de proveer de materiales a la estatal INVAP, que lleva adelante proyectos tecnológicos en el campo aeroespacial, nuclear e industrial.

En septiembre de 2010, quedó inaugurada la Ampliación del Acceso del Parque Industrial, con una inversión de $ 2.500.000, mientras continúan los trabajos de construcción de red de gas natural y de una estación reguladora de presión con una inversión de $ 1.500.000. También la obra de extensión de la red de energía eléctrica para las empresas del Parque Industrial con una inversión de $ 3.800.000.

El último anuncio fue la radicación de la empresa brasileña Termoloss, con una inversión “millonaria en dólares”, según el ministro de Asuntos Agrarios de la Provincia y ex intendente de Chivilcoy, Ariel Franetovich. Con ésta, al menos diez empresas exportadoras se han instalado en el parque industrial de Chicilcoy desde la llegada de Randazzo a las esferas de poder provincial y luego nacional.

Subsidios por doquier

En la ciudad de Randazzo el efectivo alcanza. Y, a veces, sobra. Reciben subsidios los privados y los públicos, los clubes de barrio, las iglesias, los empresarios, los políticos.

Hay un caso emblemático, de febrero de 2009, cuando Randazzo anunció obras para el distrito por un monto equivalente a tres presupuestos anuales de la Municipalidad: $ 175.158.294.

Si bien el festival de subsidios es de larga data, su aumento fue proporcional a la escalada política de “El Flaco”. Mientras en 2004 Randazzo acercó fondos para colocar piedra caliza en distintas calles de la ciudad, obras de cloacas, agua corriente y pavimentación, en 2010 los subsidios para Chivilcoy superaron los 13 millones de pesos.

Las partidas incluyen desde equipamiento para escuelas y hospitales o patrulleros, hasta dinero fresco para la Iglesia Evangélica o mano de obra y repuestos para aviones del Aero Club.

En 2006 la entonces ministra de la Producción provincial Débora Giorgi entregó subsidios por 75 mil pesos a fabricantes de maquinaria agrícola nucleados en DIMA. Otros 60 mil pesos fueron para el GAPMA (Grupo Asociativo de Productores de Maquinaria Agrícola), que cuenta entre sus miembros a la empresa El Chalero, de Chivilcoy.

Al año siguiente, entregó el primer subsidio de 50 mil pesos a un grupo exportador de equipos de caza, pesca y náutica, conformado por siete empresas entre las que se encuentran Nicieza y Taverna Hnos, también de Chivilcoy.

El 28 de diciembre de 2009, el paso de Randazzo por su ciudad para levantar la copa con su familia, significó la entrega de una ambulancia 0 km. con equipamiento de última generación, la transferencia de $ 2.000.000 para la adquisición y puesta en funcionamiento del sistema de red de cámaras de seguridad, la construcción de la planta depuradora de líquidos cloacales y red cloacal en la localidad vecina de Moquehuá, y la firma de un acta de compromiso para la compra de un Tomógrafo Helicoidal 3D MultiSlice para el hospital municipal.

El tomógrafo costó 2.350.000 pesos, pero eso no fue impedimento para que en la misma partida se incluyeran otros 484.400 pesos, que el hospital destinó a más equipamiento de alta complejidad.

Hasta el sindicato tuvo su transferencia de fondos: en noviembre del año pasado, el Gobierno nacional le otorgó $ 650.000 a Asimra, la obra social de los Supervisores Metalmecánicos.

Todo en una ciudad

Desde que en 2000 creó Fundecor, Fundación para el desarrollo comunitario y regional, Florencio Randazzo no ha dejado de darle a su terruño características de ciudad cosmopolita.

A través de un ATN remitido por el ministerio del Interior por 4 millones de pesos, creó una línea de colectivos, un hogar de Menores se convirtió en el Centro Universitario de Chivilcoy, un basural de 14 hectáreas en el Circuito Ciudad de Chivilcoy.

La localidad de 60 mil habitantes cuenta con los fondos necesarios para la implementación de internet gratuita. El Centro de Capacitación para el personal de la Empresa Distribuidora de Energía Norte (EDEN) se instaló allí.

Obviamente, la ciudad de Randazzo tiene su sede del Anses y su fábrica portátil de DNI; también su Centro Municipal de Monitoreo, que costó dos millones de pesos.
Además, este año la partida presupuestaria del municipio se incrementó para darle rango de subsecretaría a dos direcciones administrativas: las carteras de Salud y Cultura. Para la cartera sanitaria se estipularon 27.964.568 pesos, mientras que la nueva secretaría de Cultura y Educación tendrá un presupuesto de 1.955.252 pesos.

La cantidad y magnitud de las obras inauguradas en lo que va del año son una muestra acabada de la influencia política de Randazzo en la transformación de la localidad que lo vio crecer.

El 28 febrero, Scioli inauguró un jardín de infantes con una inversión de 889.000 pesos. El 8 de marzo, 17 cuadras de pavimento, dos días después, la Escuela de Educación Media N° 206 “Presidente Néstor Kirchner”.

A fines de ese mes, la ministra de Infraestructura Cristina Alvarez Rodríguez le entregó al intendente Pittelli un subsidio de 143 mil pesos para la realización de obras de infraestructura eléctrica en un frigorífico del Parque Industrial.

El 23 de abril se inauguró el mentado acceso a la Ruta 30 y el 26 el jardín maternal municipal Nº 2. Una nueva ciudad: el Anillaco de Randazzo.