1- La crisis económica internacional: ¿es financiera o política?

-A nivel de los medios internacionales se muestra como financiera, pero en el fondo es una crisis de hegemonía de un proceso capitalista basado en la valorización financiera y en la especulación del que Argentina, de alguna manera, se desconectó en 2001, pero el mundo central siguió aplicándolo.

2- ¿Ajuste o inversión para los países en crisis?

-La decisión que tomó Argentina es la correcta. Lo que nosotros decimos heterodoxia económica: lejos de ajustar, mejor es apostar al gasto, al consumo interno y a la inversión.

3- Para los países emergentes ¿se viene una desaceleración o un desacoplamiento?

-La desconexión es lo más sano que nos puede haber pasado, y la perspectiva es que esa desconexión pueda armar un espacio geopolítico que sería la Unasur en América del Sur.

4- La crisis internacional ¿tocará a Argentina y a la región?

-En principio, pareciera que el impacto será mucho menor de lo que fue en la década de los ‘90, producto de esa desconexión que nombré antes. Y, aparentemente, la demanda de los productos que tiene Argentina está basada en la expansión del consumo de alimentos en Asia.

5- Ante la crisis internacional, es menester mantener una economía ¿fría o caliente?

-Una economía al borde del pleno empleo genera tensión en los precios, pero es mucho más sana que aplicar el ajuste para mantener el excedente fiscal.

6- Incrementar las relaciones comerciales con: ¿China o Brasil?

Lo que tiene que hacer la UNASUR es contener la dinámica de Brasil y Argentina dentro ese espacio. Y las relaciones con China son importantes porque la hegemonía de Asia en el horizonte haría que Argentina se planteara niveles de asociación con este país, corriendo el riesgo de que si no se toman decisiones de asociación, de quedar subordinada.

7- ¿Aumentar o mantener las restricciones a las importaciones de los países vecinos?

-Las restricciones tienen que ver con tratar de compensar las balanzas comerciales. Lo ideal sería que no existieran esas restricciones. Pero no nos olvidemos de que los actores de estos intercambios son empresarios, a veces es difícil embarcarlos en un esquema geopolítico que los atraiga si no hay ganancias.

8- Sostener el dólar con compras del Banco Central, ¿sí o no?

-La tendencia lógica de Argentina es que baje el dólar. El dólar tiene que ir acompañando el progresivo mantenimiento de la competitividad en relación al marco original del proceso que se inicia en 2003.

9-¿Bajar o mantener los impuestos al consumo?

-La lógica sería bajarlos, hay propuestas interesantes respecto a eso, que es utilizar las tarjetas de débito para realizar rebajas al IVA por sector, por región, por país, por monto, por gremio. Es un instrumento que estaría en condiciones sobre todo de utilizarse, lo que haría un IVA diferencial para cada sector que uno quisiera. Porque hay que evitar que las rebajas al IVA, sin una posibilidad de contralor (que los precios acompañen la rebaja al IVA), se pierdan en las tasas de ganancia de las empresas.

10-¿Existe una dolarización de activos o una fuga de capitales?

-La Argentina tiene una especie de tara histórica con el dólar. Si no hay proyecto a largo plazo en el horizonte, normalmente uno termina yendo a la moneda que le puede garantizar ese largo plazo. Pero se podría iniciar un camino donde las monedas de cuenta no sean más en dólar ni en euro, y podría ser una moneda de cuenta latinoamericana. Se habla de sucre, por ejemplo. Pero sería una moneda que debería respetar las particularidades de cada país. Porque una moneda única, como el euro, no mantiene la misma competitividad de los países, y puede fundir países enteros.

11- Emisión de deuda ¿sí o no?

-Si es para inversión productiva, uno no debería asustarse. Lo que sucede es que lo ideal sería tener una deuda en pesos, en moneda propia, y no quedar endeudados en dólares o en otra divisa internacional.

12- ¿Precios fijos o variables?

-El precio es una relación de fuerzas. Tiene que ver la estabilidad de esas relaciones de fuerza. Si hay un disciplinamiento hacia un esquema monetario que respalde un modelo, y creen los actores que ese modelo es estable, es muy probable que la presión de los precios disminuya. Cuando hay puja de ingresos y poderes oligopólicos y monopólicos, es inevitable una tensión en los precios. Entonces, el día que esté resuelta la hegemonía de un proyecto político, es muy difícil que la tensión de los precios se transmita en inflación. Estamos en plena disputa de hegemonía, por lo tanto los precios reflejan esa tensión y lucha por el poder.

13- ¿Los responsables de la inflación son los salarios o la competencia?

-Hay una discusión que saldó el movimiento obrero en la Argentina, cuando vino la crisis en 2008 y se preveía que 2009 iba a ser más difícil. Hubo una ofensiva para que las patronales quisieran canjear estabilidad del empleo por salarios y una decisión de todo el movimiento obrero de decir que “no”.

No aceptaron ese canje falso porque el verdadero motor de salida de la crisis de 2009, a pesar de la crisis con actividad económica, fue, es y será el salario. Aceptar que los salarios pierdan valor por la estabilidad, como lo ofrecían, era perder incluso el motor de salida de la crisis de 2009.

14- Multas a consultoras privadas, ¿sí o no?

-Hay leyes que ojalá se aplicaran. Está la ley de Defensa a la Competencia, y otras leyes que realmente tienen atribuciones para los poderes de policía que no se han ejercido. Creo que es importante ese poder de policía del Estado, que a veces está atro-fiado, se utilice y que se coordine.

Esto es lo que ha pasado en la Unidad de Información Financiera. Antes había un sistema de lavado de dinero preventivo distribuido entre diversos organismos: Banco Central, Comisión Nacional de Valores, AFIP y UIF. A partir de 2010 pasó a estar coordinado, por una decisión política, por la UIF. Ahora hay todo un esquema de producción colectivo que permite aumentar la capacidad de sanción en el caso de violación.

15- Ante el lavado de dinero, ¿es más útil pensar en términos de macro o de micro economía?

-En términos de macro, hay que pensar en el stock de dinero no bancarizado que tiene el país, que es un dato heredado, una actividad que viene desde la convertibilidad. Argentina es el país con mayor cantidad de dólares per capita líquido en el mundo, lo que obliga a todo un esquema de largo plazo a tratar de bancarizar.

16- Retenciones al agro ¿sí o no?

-Decididamente sí, por el tipo de cambio diferencial que necesita Argentina al tener distintas competitividades. El agro es naturalmente competitivo y puede “bancar” un dólar bajo. Y la industria necesita dólares altos.

También se podría trabajar, como decimos en un libro reciente (Ensayos en honor a Marcelo Diamand; 2011), tipos de cambio múltiples para distintas actividades industriales, que se pueden manejar con subsidios, con la parte impositiva, o con retenciones. Y no sólo al agro, ya que hay otros sectores que merecerían ser retenidos en mayor proporción, como la minería.

17- Para invertir: ¿bonos o ladrillos?

-En Argentina es un clásico los ladrillos, y la verdad es que la industria de la construcción genera un efecto multiplicador muy alto. Si se pudiera ensamblar la producción de viviendas para sectores trabajadores de salarios medios y bajos, que es donde faltan construcciones, sería una buena inversión. Hay construcción para el quinto quintín más rico de Argentina. Falta la oferta para las capas medias y medias bajas.

18- ¿Moneda regional o fortalecimiento de las locales?

-La verdad es que una moneda regional no es mala, porque tener activos de reserva latinoamericanos no estaría mal. Lo que es real es que la moneda y la soberanía monetaria no deberían regalarse. Porque la moneda no es una cuestión instrumental, es una cuestión simbólica también: una mediación social que además identifica un espacio de acumulación de capital y de relaciones humanas que no se puede perder.

19- ¿Modelo exportador o consumo interno?

-Decididamente primero el consumo interno y después la inserción internacional. Es posible hacer las dos cosas, pero hay que tener el modelo interno funcionando seguro. Que es lo que vamos a ver con crisis internacional como la única salvación de que esto se mantenga funcionando.

20- ¿Soja o industria nacional?

-La verdad es que como viene la cuestión de la soja, le falta a mi entender valor agregado interno. Pero es inevitable que por la tecnología de producción, si no hay ramas industriales integradas en la Argentina, no haya trabajo para las 5 ciudades más importantes. La reindustrialización es una cuestión básica de este modelo. Lo que hay que discutir es cuáles ramas de producción.

21- Ahorros: ¿adentro o afuera?

-Este es un problema cultural. Las capas dirigentes argentinas están acostumbradas a ahorrar afuera. Y esto no ha cambiado en esta etapa. Sí lo que va a haber son más controles y más sanciones.

22- ¿El arte de la guerra de Mao Tse-tung o El príncipe de Maquiavelo?

Me quedo con Mao Tse-tung.

23- ¿Manuel Belgrano o San Martín?

-Son complementarios, pero primero San Martín y después Belgrano, porque primero está la política de alto nivel, y después viene la aplicación en la economía.

24- Más relevante: ¿el 17 de octubre del ‘45 o Ezeiza de ‘73?

-Creo en esos dos hechos como comienzo y fin de ciclo de un movimiento social. Las expectativas de que eso cristalizara las quema (Carlos) Menem, pero empezó en ese proceso de diputa interna.

-Pienso que la hegemonía ideológica dentro del movimiento nacional define el camino de Argentina. Si miramos las últimas elecciones, el 70% tiene el origen de ese movimiento nacional, del peronismo, pero dentro del peronismo hay una disputa ideológica sobre cuál es el camino, y hay sectores que realmente no han tenido ningún prurito en aliarse con los enemigos de la Nación. Y eso se paga. Creo que estamos en el inicio de una nueva etapa histórica, con el peronismo y algún otro sector que venga, adonde los que han traicionado la ideología histórica del movimiento nacional, sería saludable que vayan perdiendo poder.

25- El 2000, ¿nos encontró unidos o dominados?

-El 2000 nos encontró re-contra dominados. Estábamos perdidos.

26- ¿Para un peronista no hay nada mejor que otro peronista?

-La verdad es que creo que eso es para pasar a tomar vino y discutir. Cuando se discute poder, hay “peronistas” y “peronistas”. Hay peronistas que han jugado con el enemigo y han pasado a defender otros intereses del movimiento nacional, y ahí se termina el amor.

27- Políticamente: ¿hay que tragar un poco el “sapo” o ser firmes hasta las últimas consecuencias?

-Hay una frase del Che que dice “Política de principios es la mejor política” y nosotros la hemos aplicado. De hecho, dentro del movimiento nacional uno se traga “sapos” porque es inevitable cuando se discute hegemonía de un país. Ahora, si uno quiere ser testimonial, pierde la posibilidad de acceder al poder. El peronismo es, básicamente, una estructura de poder con una ideología nacional y popular. Que a veces cristaliza en un proceso de liberación, y veces, como pasó con Menem, en una traición alevosa. Atrás de eso están los actores. Entonces, salir de eso, significa muchas veces tragarse algún “sapito”, a veces “sapones”.

28- Años de militancia: ¿volanteada o pegatina?

-La verdad es que me tocaban las dos. Es más rápida la volanteada, menos tiempo. Y más en época de inseguridad, en el ‘78, las volanteadas eran casi operaciones de alto nivel de riesgo.

29- ¿Cafrune o Zitarrosa?

-A mí me gustaba Cafrune.

30- ¿Periodismo militante o periodismo a secas?

-La verdad es que no puedo escribir si no es con un objetivo político. Así es que no me sale otra cosa. Entiendo que haya otras cuestiones artísticas, pero en sí mismo, hacer eso es un arte también.º

31- Relaciones con la iglesia: ¿misa en la Catedral o en Luján?

-Respeto el folclore, y a pesar de que fui desde Jardín de Infantes hasta 5to año a un colegio religioso, me transformé en un agnóstico terrible. No sé si por haber estado tanto tiempo metido ahí adentro, pero con algunas cuestiones dogmáticas (no es que me haya desilusionado, pero hoy ya con la edad que uno tiene) uno se pone más duro.

32- Militancia hoy: ¿la plaza o las redes sociales?

-Creo que las redes sociales, incluyendo a la militancia social, sindicatos, es más razonable que el impacto de una sola movilización. Siempre fui partidario de que era necesario generar una estructura de cuadros que sostenga toda una presencia política. Cuando perdimos, es porque no funcionó una estructura de militancia. Justamente, la dictadura de 1976 eliminó compañeros porque eran cuadros que podían afectar, en el horizonte, la hegemonía de su proyecto. No fue una decisión arbitraria o loca, si no científica para ellos. Para matar a un proyecto había que matar a los actores, y destruir la base económica de ese proyecto.

33- ¿Es necesario tener un 6-7-8 en la TV Pública?

-Creo que para la etapa de no tener nada a tener 6-7-8 es trascendente que haya existido. Porque fue la única posibilidad de contrarrestar el bombardeo mediático que han sostenido dos o tres diarios en Argentina. En un proceso normal, donde funcione la ley de Medios que se aprobó, 6-7-8 será un programa más, en medio de tantos otros programas.

34- Condena a Sergio Schoklender, ¿sí o no?

-Sí.

35- ¿Amado Boudou o Mercedes Marcó del Pont?

-Amado Boudou sorprende por la capacidad de transmitir lo que se está haciendo, que no es fácil para una conducción política del Estado. Siempre es necesario que haya alguien que transmita y explique la parte económica, una función que nunca estuvo bien asumida. Cuando la explicaba (Domingo) Cavallo, más valía escaparse. En ese sentido, Boudou cumple un rol.

Pero Marcó del Pont tiene otra función muy importante que es seguir impulsando al Banco Central como un instrumento de policía del Estado. El Banco Central es un instrumento codiciado por las estructuras de poder ideológicas que quieren que no se maneje políticamente sino técnicamente, lo que implicaría hacer política neoliberal.

36- ¿Eduardo Duhalde o Ricardo Alfonsín?

-Por la pelea que va a significar la lucha ideológica del peronismo, la situación es por Duhalde. Porque ha derivado en una especie de mackartismo y asunción de la necesidad de reprimir y asociarse con lo que pasó en el ‘76, y sin verdad y sin Justicia, no hay salida del pasado. Creo que él está asumiendo un esquema de derecha que no le queda más que un espacio muy reducido que la sociedad argentina ha repudiado. Los resultados se vieron en las elecciones.

37- ¿Daniel Scioli o Gabriel Mariotto?

-Scioli sin Mariotto no hubiera sacado la cantidad de votos que sacó, se hubieran disparado para el lugar de Sabatella. Scioli tuvo un complemento que le dio un porcentaje impresionante en la Provincia.

38- ¿Norberto Galasso o Pacho O’Donell?

-Galasso.

39- ¿Hebe de Bonafini o Estela de Carlotto?

-Han cumplido dos roles distintos. Una es el combate y la otra es la racionalidad. Y fueron necesarias las dos cosas. Si hubiera quedado sólo la racionalidad, quizás no hubieran llegado adonde estaban. La resistencia de todo este esquema la puso, inicialmente, la imagen de Hebe no callándose, no doblegándose.

40- ¿Twitter o Facebook?

-Últimamente estoy en Twitter con pocos seguidores. Me parece que es un instrumento, hay que saber manejarlo. Yo como estoy en un cargo crítico, donde todo lo que uno hace, lo miran, cuesta.

41- Actividad docente: ¿tiza o fibrón?

-Prefiero la tiza. Pero claro, ya está vieja.

42- Cine: ¿Los intocables o la trilogía de El Padrino?

-La trilogía de El padrino.

43- ¿Pino Solanas o Leonardo Fabio?

-Me quedo con el Pino cineasta. Que no salga de ahí, que siga haciendo películas que las sabía hacer, y bien.

44- Humor en TV: ¿Capusotto o Marcelo Tinelli?

-Capussotto.

45- Fútbol platense: ¿Estudiantes o Gimnasia?

-El Lobo.

46- Música platense: ¿Virus o los Redonditos de Ricota?

-Los Redonditos. Y hay una banda, La selva de Miguel, de unos amigos.

47- ¿Juegos o juguetes?

-Juegos.

48- ¿La Mujer Maravilla o Gatúbela?

-La Maravilla.

49- ¿Sillón y TV o actividad física?

-Hago actividad física, salgo a correr.

Es difícil quedarme tranquilo mucho tiempo.

50- Ante los problemas: ¿charla con amigos o diván?

-En una sociedad con participación social: charla con amigos. Cuando eso se termina y hay soledad, o derrotas políticas: el diván. En el ‘76 uno vivió el aislamiento progresivamente. Hasta recomponer los lazos sociales, me parece que la Argentina necesitó psicólogos. Es lo que va a pasar en España después de la crisis. 

Yo creo que la soledad y el individualismo llevan a la necesidad del diván.