El tablero político que espera a la provincia de Buenos Aires desde el próximo 10 de diciembre hará que los consensos y acuerdos entre los diferentes sectores sean moneda corriente. Es que, el gobernador electo, Axel Kicillof, no se encontrará con una Legislatura a gusto para la sanción de leyes claves. Por caso, en el Senado tendrá minoría y en Diputados, por el momento, al menos necesitará de un aliado estratégico.

De esa manera, las negociaciones para alcanzar la gobernabilidad durante los primeros años de una gestión que deberá afrontar una sensible situación financiera serán más que centrales. En ese sentido, las vacantes en los directorios de diferentes organismos aparecen como primera prenda de negociación a la hora de consolidar acuerdos.

Por caso, vale recordar la última discusión presupuestaria de María Eugenia Vidal en diciembre de 2018. Para la aprobación de la Ley de Leyes, en el reparto de vacantes, apareció como motor de acuerdos las bancas del directorio del Banco Provincia.

En aquel momento, el reparto dejó “felices” a la mayoría de los integrantes de la Legislatura bonaerense. El massismo tuvo su espacio, lo mismo la Unión Cívica Radical (en representación de Cambiemos), y el denominado espacio “de los intendentes” (bloque PJ Unidad y Renovación).

Así, ingresaron a la cúpula del Banco Provincia el ex senador bonaerense Sebastian Galmarini, en representación del Frente Renovador de Sergio Massa; la ex diputada nacional Juliana di Tullio, como parte del acuerdo de los alcaldes peronistas con un guiño al kirchnerismo; Héctor Vivaldo; ex secretario de Hacienda de Almirante Brown, en otro guiño a los alcaldes; y Diego Rodrigo, hombre de la UCR. Los cuatro mencionados, retendrán su banca en el directorio hasta el 2021.

De esa manera, los vencimientos de mandato que le esperan a Mario Meoni (reemplazó a Daniel Arroyo); Mario Biondi; Felipe Hughes; y Daniel Alonso, aparecerán como las primeras prendas de negociación en la Legislatura.

Claro está, hasta la conformación de la nuevas Cámaras, las futuras cuatro vacantes no entrarán en el debate político por “cobrar”. Sin embargo, por los pasillos comienzan a sonar fuerte como prenda de eventuales acuerdos y que podrían tener su debut, nada más y nada menos que en la sanción presupuestaria.

Conforme lo recolectado por LaTecla.info, la Ley de Leyes fue recientemente prorrogada. Es que, la ausencia de la sanción del Presupuesto nacional pone un freno legal a la presentación de su par bonaerense. Así, la fecha límite del 31 de octubre fue prorrateada y la sanción quedaría para la nueva gestión que echaría a mano las vacantes en el BAPRO a la hora de consolidar los votos para su primera Ley de Leyes.